Qué ver en Pamplona en 2 días

Pamplona, una joya ubicada al norte de España, te espera con su riqueza histórica, su profunda cultura y su impresionante arquitectura que te dejarán fascinado. Esta encantadora ciudad, capital de Navarra y la más grande de la provincia, es un verdadero tesoro por descubrir. A pesar de su tamaño, es el destino perfecto para una escapada de fin de semana.

En este blog te vamos a presentar algunos de los mejores lugares que puedes ver en Pamplona en un recorrido de dos días. Así que prepárate para dos días llenos de diversión, aprendizaje y experiencias inolvidables en esta encantadora ciudad. Desde sus adoquinadas calles hasta su exquisita gastronomía, pasando por museos, monumentos históricos, imponentes murallas y su majestuosa catedral, Pamplona tiene mucho que ofrecer. ¿Y qué decir de los Sanfermines? ¡Experimenta la emoción de los encierros de toros y las festividades que han cautivado al mundo!

Conoce lo mejor de Pamplona en dos días

Día 1

La Plaza del Castillo

Empieza tu visita a Pamplona en uno de los lugares más emblemáticos y concurridos de la ciudad: la Plaza del Castillo. Es un espacio pintoresco que se ha ganado el cariño de los habitantes locales, quienes la llaman cariñosamente “la sala de estar” debido a su importancia en la vida social de la ciudad durante siglos. Es el lugar perfecto para comenzar la mañana tomando un café en una de sus terrazas o compartiendo una comida al aire libre en un ambiente animado.

Recorre este lugar histórico y experimenta un paseo agradable mientras prestas atención a la variada arquitectura que lo rodea, con edificios de diferentes estilos y épocas, cada uno con su propio encanto especial.

Además, la famosa Plaza del Castillo es el escenario de numerosos eventos culturales y públicos, como procesiones, mercados, exposiciones y conciertos. Así que no dudes en consultar si hay algún evento especial programado para la fecha de tu visita, ya que podrías tener la oportunidad de disfrutar de una experiencia cultural auténtica de la región.

La Catedral de Pamplona

Luego, puedes continuar tu recorrido por las encantadoras calles del casco antiguo de la ciudad hasta llegar a la Catedral de Santa María la Real, que es mucho más que un edificio religioso; es un auténtico tesoro de arte, cultura, historia y arquitectura.

Una vez en las inmediaciones de la Catedral, te recomendamos detenerte por un momento a admirar la belleza arquitectónica de la catedral con su fachada neoclásica que contrasta de manera fascinante con el interior de estilo gótico. Explora sus diferentes áreas, pasea por los pasillos del claustro que se conservan desde el siglo XIV. Visita las diversas salas, el refectorio, la capilla, la sacristía, los dormitorios, la cocina y no te vayas sin conocer el Museo Catedralicio que alberga una colección de arte sacro y objetos de interés histórico. Cada uno de estos espacios dentro de la Catedral te ofrecerá una visión auténtica de la vida en épocas pasadas.

Calle Estafeta

Aprovecha si es la hora del almuerzo para hacer una parada en uno de los bares o restaurantes de la famosa calle Estafeta para probar los deliciosos pintxos. También a lo largo de esta calle podrás encontrar tiendas y boutiques que ofrecen moda, souvenirs y productos artesanales si te interesa llevar recuerdos.

Esta antigua calle es considerada una arteria vital en la ciudad, y su popularidad se dispara durante las festividades de San Fermín en julio. En ese emocionante mes, valientes corredores desafían a los toros en un espectáculo que es mundialmente conocido.

Si tu visita es en otra época del año, no te preocupes, porque la Calle Estafeta sigue siendo un lugar encantador. Podrás explorar sin prisas la arquitectura de los edificios, con sus balcones de hierro forjado y fachadas de piedra que te brinda un ambiente acogedor.

Las Murallas de Pamplona

Por la tarde, te invitamos a realizar un fascinante viaje a la Edad Media explorando las antiguas Murallas de Pamplona. Estas históricas fortificaciones te remontarán al pasado y te ofrecerán un testimonio vivo de la rica historia y evolución de la ciudad.

A pesar de que no se han preservado todos los fragmentos originales de las murallas debido a cambios urbanísticos, los restos que aún permanecen son impresionantes.

Tu recorrido puede comenzar en el pintoresco Parque de la Media Luna, donde encontrarás información útil sobre la historia de las murallas que te preparará para tu aventura. Desde allí, dirígete al emblemático Portal de Zumalacárregui, uno de los accesos históricos a la ciudad amurallada, y si dispones de tiempo, no dejes de visitar el Puente Medieval de la Magdalena, un lugar poco conocido, pero con una vista encantadora del río Arga. Para concluir tu visita a las murallas disfruta de la serenidad de los Jardines de la Taconera, un hermoso parque que te brinda la oportunidad de relajarte.

Paseo nocturno en el Casco Antiguo

Si aún cuentas con energía al llegar la noche puedes explorar las diversas opciones de entretenimiento que te ofrece el Casco Antiguo. Tienes la opción de dar un paseo romántico por las estrechas calles que se encuentran iluminadas de manera espectacular en la noche, capturar fotografías en monumentos históricos, degustar un buen vino navarro en algunas de las terrazas al aire libre y asistir a conciertos o espectáculos que puedan estar programados durante tu visita.

Día 2

Ciudadela de Pamplona

Este segundo día vamos a empezar a visitar el monumento estrella de la capital Navarra: la Ciudadela de Pamplona, un lugar que sin duda vale la pena visitar durante tu estancia. Te sugerimos dedicar aproximadamente dos horas para explorar a fondo este imponente bastión militar, que hoy en día ofrece espacios de recreación y cultura.

Fue construida entre 1571 y 1645 durante el reinado de Felipe II de España. Su principal función era la de defender la ciudad de los ataques externos y servir como base militar. En su diseño el arquitecto italiano Giovan Battista Agustoni combina funcionalidad defensiva con elementos estéticos. Al observar, notarás como sus enormes muros, baluartes, fosos y puentes levadizos reflejan la ingeniería militar avanzada de la época.

Hoy en día, la Ciudadela cuenta con extensos jardines, y espacios recreativos ideales para toda la familia. Aquí puedes practicar deportes y juegos, además de asistir a diversos eventos culturales.

Museo de Navarra y Palacio de Navarra

Ahora nos trasladamos a dos lugares fascinantes para los amantes de la cultura y la historia: el Museo de Navarra y el imponente Palacio de Navarra.

El Museo de Navarra te sumerge en la historia de la región a lo largo de los siglos, exhibiendo obras maestras de diferentes épocas y estilos artísticos, además de presentar exposiciones temporales sobre diversos temas.

Justo al lado del Museo, se encuentra el majestuoso Palacio de Navarra, un edificio histórico que ha presenciado innumerables eventos a lo largo de los años y que actualmente alberga la sede del Gobierno de Navarra. Afortunadamente, el Palacio se encuentra abierto al público para su visita.

Parque Yamaguchi

Finaliza tu recorrido por Pamplona visitando el hermoso Parque de Yamaguchi. Un jardín japonés lleno de belleza natural, que cuenta con elementos característicos como puentes, estanques, cascadas y vegetación exuberante.

Puedes dar un paseo relajante por los senderos, encontrar un rincón tranquilo para leer un libro o simplemente sentarte junto al agua y disfrutar de la calma que ofrece el entorno. Si viajas con tu familia, no te preocupes, el parque cuenta con áreas de juego diseñadas especialmente para los más pequeños, convirtiéndolo en un destino perfecto para un tiempo de diversión al aire libre.