Ruta en coche de 3 días por la isla de Mallorca

Mallorca, la isla más grande del archipiélago de las Islas Baleares, es un destino que ha cautivado a viajeros durante siglos tanto por su ubicación geográfica, como por su cultura, historia y su encanto. Esta preciosa perla en medio del mar posee un clima cálido que la convierte en un lugar apetecible para visitar en cualquier época del año para los amantes del sol y la playa. Pero las playas de agua turquesa y calas no son lo único hermoso de Mallorca porque ofrece mucho más. Sus paisajes son variados, desde montañas escarpadas hasta llanuras cubiertas de almendros en flor. Hay muchos rincones paradisíacos que te esperan en la Isla Mallorquina.

En este blog, te mostraremos cómo en solo tres días puedes disfrutar al máximo de este tesoro en medio del Mediterráneo. Así que, si tienes la posibilidad de hacer una escapada corta, recuerda: Mallorca es el destino perfecto para disfrutar al máximo en poco tiempo.

Descubriendo la Isla de Mallorca en 3 días en coche

Día 1

Casco Antiguo

Puedes comenzar tu día dando un paseo por el Casco antiguo de Mallorca que te llevará por un laberinto de historia y te pondrá en contacto con la vida local.

Mientras recorres, observa la arquitectura que ha sobrevivido el paso del tiempo y los detalles en las fachadas de los edificios antiguos: balcones de hierro forjado, puertas de madera tallada, patios decorados y plazas que te invitan a hacer una pausa y apreciar la belleza que te rodea. Cada uno de estos elementos cuenta una historia y refleja los diferentes estilos que han dejado su huella en la evolución de la isla a lo largo de los años.

En esta zona también se entrelazan mercados tradicionales, cafés con encanto y tiendas artesanales. Te invitamos a perderte en estas pintorescas calles, a probar la deliciosa gastronomía local, y a sentir cómo la vida cotidiana de Mallorca cobra vida a tu alrededor.

La Catedral de Palma

Uno de los imprescindibles que se alza dominante en el corazón del centro histórico de Palma es la Catedral de La Seu. Esta edificación imponente no solo es un símbolo de la ciudad, sino que también se convierte en una parada esencial en tu itinerario. A medida que exploras el interior de la catedral, te maravillaras con la luz natural que juega con los espacios y las formas arquitectónicas de los vitrales, creando una atmósfera única. Además de este espectáculo visual, podrás contemplar el esplendor del altar principal y dedicar tiempo a explorar el Museo, que alberga una valiosa colección de arte religioso y elementos históricos.

El Palacio de la Almudaina

Otro sitio histórico que no querrás perderte es el Palacio de Almudaina, un edificio impresionante que te permitirá descubrir cómo vivió la realeza y la huella que dejaron. En tu recorrido podrás visitar el Salón del Trono y el Salón de Embajadores, los patios interiores, los jardines del palacio y las exposiciones que se están presentando.

Además de explorar el interior, puedes tomarte el tiempo de disfrutar de contemplar el Palacio a distancia mientras caminas por el Paseo Marítimo de Palma.

Castillo de Bellver

Para terminar el día te recomendamos que veas el atardecer en el Castillo de Bellver, que queda a tan solo 3 kilómetros del centro de la ciudad. Aquí puedes dar un recorrido por sus diferentes salas y estancias, visitar el Museo de la Historia de la Ciudad y por supuesto disfrutar de las vistas panorámicas del entorno desde las amplias terrazas del castillo mientras el sol se pone en el horizonte. El cambio de luz y la temperatura suave te permitirán disfrutar de una experiencia muy agradable. Por lo general suele estar abierto hasta a las 6:30 en verano. En todo caso, siempre verifica con antelación los horarios de visita para la fecha que piensas viajar.

Para tener un acceso más directo al Castillo puedes ir en coche hasta el aparcamiento.

Día 2

Serra de Tramuntana

En este segundo día, nos alejaremos de la capital de la isla y emprenderemos un viaje hacia el oeste, en dirección a la majestuosa Serra de Tramuntana. Las carreteras que nos guiarán están en excelentes condiciones y nos permitirán atravesar paisajes de una belleza deslumbrante durante todo el trayecto.

Esta cadena montañosa, reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, cautiva a los visitantes con sus paisajes naturales y con la vida silvestre que alberga. Es un destino perfecto para los amantes de las caminatas y también para quienes buscan oportunidades de relajación, aventura y al mismo tiempo conexión con la naturaleza.

Mirador Sa Foradada

En la misma región de Serra de Tramuntana, a unos 40 kilómetros en línea recta desde la capital de la isla de Mallorca, te espera el Mirador Sa Forada. Este lugar va más allá de ser solo un punto de observación. Su nombre, que significa "agujero negro" en catalán, evoca una imagen de una formación rocosa en medio del mar con una cavidad tallada por la naturaleza. Posee acantilados y una belleza marina que realmente te regala una vista incomparable.

Cala Deià

A poca distancia del punto anterior se encuentra Cala Deià, una cala escondida que resulta difícil de describir, pero que te dejará sin palabras desde el momento que pongas tus pies en sus orillas. Con aguas cristalinas, arena dorada, rodeada de acantilados y naturaleza exuberante, es sin duda un paraíso en el que podrás disfrutar el resto del día. A pesar de su atmósfera íntima y rústica, encontrarás algunos restaurantes que te permitirán disfrutar de una deliciosa comida con un entorno bellísimo.

Al concluir este segundo día de viaje, te recomendamos que puedas conducir de regreso a la capital de la isla para continuar con tu recorrido desde allí al día siguiente.

Día 3

Playa de Es Trenc

Este tercer día te sugerimos tres destinos que puedes conocer que son maravillosos. Si tienes tiempo puedes ir a más de uno, pero todos valen la pena conocer.

La Playa de Es Trenc se encuentra al sureste de la capital de la isla Palma de Mallorca, a unos 45 kilómetros y es considerada una de las playas más hermosas y virgen de la isla. Gran parte de la zona está protegida, lo que le ha permitido seguir conservando su encanto natural. Así que anda, visita y disfruta de un baño refrescante en sus aguas azules cristalinas poco profundas, camina en su extensa franja de arena blanca o alquila una tumbona para pasar el día en este entorno soñado.

Cala Mondragó

Cala Mondragó es otro de los destinos que destaca en Mallorca por ser una de las calas más hermosas y vírgenes de la isla. Lo que la hace aún más especial es su ubicación dentro del Parque Natural de Mondragó, una zona protegida que resguarda su entorno natural. El color turquesa en sus aguas, la suave arena blanca y los imponentes acantilados forman parte de su encanto. Una ventaja adicional es la posibilidad de recorrer senderos panorámicos que ofrecen vistas impresionantes. Además de relajarte en sus aguas, también puedes disfrutar del emocionante snorkel.

Cuevas del Drach